Ya estoy contigo,

De poco valgo,

salvo ser el fiel testigo de tu  impertbable ausencia,

asi que lo prefiero contigo,

Me marcho despacio,

no correré,

ya ves,

y si nos vemos?

cuanta dicha ,

y cuantisimo regocijo,

y desde alli ya cuidaremos,

de los nuestros,

que son demasiados caprichos,

porque mucha gente nos quiso, sin memoria,

y nosotras debemos el cumplido,

de velar por los caminos,

de tantos y tantos conocidos.